Esta colección ephemera está compuesta por 137 postales de muy diverso tipo en cuanto a la impresión, desde las de color sepia, las de blanco y negro a las más actuales en color, pasando por las de papel fotográfico y o las de cartón. En cuanto a la temática, todas ellas presentan imágenes habituales en este tipo de material efímero: monumentos, paisajes, lugares de interés turístico de las ciudades, tipos regionales, espacios naturales, etc. El coleccionista se tomó su tiempo para ir organizándolas, reseñando su procedencia y encuadernándolas en un "sencillo" archivador.
El recuerdo de los viajes ha variado con el paso del tiempo al hacer referencia a la tecnología, pero cuando nos referimos a los viajeros, el objetivo sigue siendo el mismo prácticamente desde que se inventó la fotografía.
La intención de quien compraba postales o de quien hoy se hace un “selfie” delante de un monumento, es recordar y mostrar con una imagen, aquellos lugares que se visitan con una intención cultural, de ocio, religiosa, de salud, o incluso económica. No es más, que recordar a todos que: "yo estuve allí".