Pieza destacada
León del Malecón. Escultura conmemorativa a modo de 'triunfo', ubicada en 1776 como remate del pretil del muro de contención de las aguas del Segura.

Nos encontramos ante una escultura conmemorativa del siglo XVIII, realizada en piedra arenisca y concebida a modo de alegoría o 'triunfo', que fue instalada en 1776 en el emplazamiento que la hizo popular, como remate del pretil del muro de contención de las aguas del Segura que se había reforzado por iniciativa del conde de Floridablanca.

 

La escultura se situó en la margen izquierda del río, junto al paseo del Malecón, a los pies de la escalinata que da acceso al paseo y en el comienzo del camino que partía de la ciudad para adentrarse en el soto del río. A la derecha, entre otras imágenes, puedes ver una fotografía preciosa del León y de su entorno, conservada el Archivo Municipal de Murcia.

 

Sin embargo, tal y como recogen Ismael Galiana y Adolfo Fernández en su libro 'Guía secreta de Murcia, Cartagena y Mar Menor' (página 79. Al-Borak Ediciones, Madrid, 1977), la escultura tuvo un emplazamiento anterior en la llamada Puerta de Orihuela, al Este del recinto amurallado, y un simbolismo diferente al que se le otorgaría después: el de defensa regia de la Murcia castellana frente a la Corona de Aragón.

 

A la cuestión de su ubicación primitiva y al propio León del Malecón se refirió José María Ibáñez, cronista oficial de la ciudad, en un interesante artículo publicado el 18 de mardo de 1928 en 'Flores y Naranjos', bajo el título 'De la Murcia de antaño. El León del Malecón' (el enlace a dicho artículo está al pie de la página, entre las fuentes de este texto).

 

También es de especial interés la ponencia de Clara Alarcón Ruiz 'Donde empieza la ciudad: El león del Malecón. Un espacio de conexión entre la huerta y la ciudad de Murcia', recogida en la publicación de las actas del 12º Seminario sobre folklore y etnografía (puede consultarse al pie de esta página).

 

La fecha de realización de esta obra sería anterior a la de su instalación en el Malecón en 1776, pero dado que el escudo de Murcia que sostiene el león bajo sus garras ya poseía la séptima y última corona (hoy imposible de distinguir por el deterioro de la piedra), el León, de autoría desconocida, debió ser esculpido después de la victoria de Felipe V en la Guerra de Sucesión (1713), y de la concesión unos años antes de la mencionada séptima corona al escudo murciano, no permaneciendo en la Puerta de Orihuela más de 60 años.

 

Con su traslado e instalación en el Malecón en el último cuarto del siglo XVIII, el León mantuvo su sentido de triunfo, aunque cambiando 'el enemigo' vencido. De hecho, en el mundo del arte un 'triunfo' es una escultura conmemorativa que exalta la victoria de un personaje histórico, bíblico o mitológico. La representada aquí, con su instalación en el Malecón, viene a simbolizar la victoria de la ciudad de Murcia sobre las riadas gracias a dicho muro de contención.

 

La obra original constaba de tres elementos diferenciados: una pirámide truncada a modo de basamento, un bloque prismático con una lápida de mármol negro en uno de sus lados y la escultura propiamente dicha.

 

La inscripción de la lápida de mármol negro reza así:

 

"Se reedificó esta pared y entrada al Malecón siendo Corregidor y Capitán a Guerra de esta ciudad el señor don Joachim de Pareja y Obregón Chacón Pacheco Merino y Roxas, Caballero Maestrante de la Real de Granada, y Comisarios los señores don Alexo Díaz Manresa, don Salvador Vinader Moratón, don Matheo Zeballos y Bríñez, don Lázaro González Campuzano regidores, don Jophe de Blanes y Domenech Jurado. Año 1776".

 

Tiempo después, en un lateral del pedestal, se añadió una inscripción relativa a una reforma realizada en el muro del río en 1838.

 

La pieza fue retirada de la vía pública en 1998, con motivo de la construcción de la Pasarela Manterola y de la reforma urbana del lugar, y tras numerosos trasiegos, fue restaurada por la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia a instancias del Ayuntamiento de Murcia.

 

Desde el año 2011, el Museo de la Ciudad alberga la escultura original del león leopardado, que sostiene una representación del escudo de la ciudad bajo sus garras, y la lápida de mármol con la inscripción informativa que se encontraba ubicada en el pedestal original, hoy desaparecido.

 

Exponemos la obra en la primera planta del Museo, sobre una peana en la que incluímos algunas imágenes de interés, como fotografías de los años 80 del León frente al desparecido Club Remo, que debemos a la asociación de voluntarios culturales. Además, también mostramos un óleo de F. Oliva perteneciente a la colección pictórica municipal (puedes ver una foto entre las imágenes de la derecha de esta página).

 

En su emplazamiento a la entrada del paseo del Malecón, el Ayuntamiento de Murcia situó una copia de este simbólico monumento, tanto del león como del pedestal y la lápida, que durante más de dos siglos se vinculó a la alegoría del triunfo de la ciudad sobre las embestidas del río Segura, para seguir recordando la finalidad del Malecón y la lucha de Murcia contra los desastres provocados por las riadas.

 

Curiosidades del León del Malecón

 

Como primera curiosidad, debemos añadir que en 1937, en la emisión de moneda llevada a cabo por el Ayuntamiento de Murcia durante la Guerra Civil, siendo alcalde don Fernando Piñuela, la imagen del León del Malecón ocupó una de las caras de los billetes de 10, 25 y 50 céntimos, y de los de peseta (puedes verlo en una de las imágenes que acompañan a esta publicación). Dicha moneda fue conocida con el nombre de 'piñuelas', en alusión al nombre del alcalde de Murcia. 

 

Una segunda curiosidad es que el pintor Pedro Flores incluyó al León del Malecón en una de las obras de su serie de 'Costumbres murcianas', en concreto en la titulada 'Los molineros del Malecón', llevada a cabo a finales de los años 50 del siglo pasado (puedes verla en una de las fotos de la galería de imágenes de esta página).

 

Con el paso de los años, durante los siglos XIX y XX, el León del Malecón se hizo muy popular en la ciudad y fue objeto de coplillas y frases, como 'eres más viejo que el León del Malecón' o 'estás más aburrido que el León del Malecón'.

 

En la línea del aburrimiento que se le atribuía al monumento, se encuentra un relato publicado en 'El Segura. Diario de intereses materiales, científico, literario, artístico y de noticias', el 5 de marzo de 1863 (página 2).

 

En él intervienen, de forma imaginaria, dos personajes: el rey Fernando VII y el propio León del Malecón. Ambos expresan con amargura y envidia que ya nadie pasea por el Malecón, porque ahora todo el mundo sólo siente interés por una irrupción de los nuevos tiempos en la ciudad: el ferrocarril (inaugurado en 1862, apenas unos meses antes, por la reina Isabel II, hija de Fernando VII).

 

El relato dice así:

 

"Pasillo.- La accion se figura en Murcia: Los personajes son la estatua del Rey Fernando y el León del Malecón. Empieza el Rey de las selvas dando un bostezo feroz: Aaah. Pues me divierto. No hay paciencia ¡voto a briosl que aguante esta soledad; ¡este abandono es atroz! Aquí ya no viene nadie aunque puro brille el sol. Las niñas han dado ahora en marcharse a la estación, y hacen de mí el mismo caso que del gallo de Morón. ¡Oh, desengaños! ¡Oh tiempos! ¿Y todo por qué, Señor? ¡Por ver cómo lanza el humo la máquina de vapor! No puedo seguir asi. Yo estoy tocando el violón— dijo y lanzando un bramido, del pedestal se tiró, y en menos de veinte brincos su magestad se plantó en la entrada del paseo de Floridablanca. ¡Oh! (ésta esclamacion aquí es de un gusto y un sabor...).

 

Estaba el Rey Don Fernando en postura 'comme il faut', como aquel que va a bailar un solo de Rigodón, el Leon le hizo un saludo y de este modo le habló: compañero (que entre Reyes no hay etiquetas ni vos)— ¿sabes que estoy fastidiado? ¿Sabes que hace un mes o dos que no hay ni una sola niña que se asome al Malecón? Una tarde el Municipio como a un chino me engañó, mandando tocar la música y de las bellas, la flor, ante mi real presencia desfilaron en montón, pero, ¡ay! desde aquella tarde mi reinado concluyó. No he vuelto a ver a ninguna. ¡Se me parte el corazón! Y con la punta del rabo una lágrima enjugó.

 

El Rey Fernando le dice, ¡Vienes en buena ocasión! Si te encuentras desairado, lo mismo me encuentro yo. Pasan por aquí, es verdad, pero van a la estación. Ninguna entra en el paseo. Esto es terrible. Es atroz.

 

Tú al menos las ves pasar —dijo con pena el Leon—. Tú, rey pintado de ocre, rey de amarillo color, tienes junto a ti a tu esposa, que es una chica de pro; puedes hacerle una fiesta y echar fuera el mal humor, ¡pero yo me encuentro solo! ¡Voy á dar un reventón! Y ambos a dos esclamaron, en un duo aterrador, ¡Malhaya el ferrocarrill, reniego de la estación! El Rey siguió en la postura del que baila rigodón. La señora no hizo caso y como estaba siguió, ¡y el León sólo y mohino se volvió hacia el Malecón!".

 

El León del Malecón pudo llorar por un ojo, porque aunque su deterioro se fue acrecentando en los años siguientes, el grupo escultórico dedicado a Fernando VII al que se alude en ese relato fue destruido poco después, dejando su espacio al actual monumento al Conde de Floridablanca, obra del escultor Baglietto, que ocupa uno de los extremos del Jardín del mismo nombre en el barrio del Carmen.

 

Como vemos, esta pieza llegó a formar parte recurrente de las crónicas políticas o sociales en la prensa, siendo objeto de muchas metáforas: otro ejemplo lo tenemos en el Diario de Murcia del 1 de octubre de 1892, en una noticia en la que, aludiendo a una decisión gubernamental errónea, en opinión del periodista, él mismo se permitió afirmar que "cuando un ministro propone una reforma, deberia echarse a temblar el leon del Malecón".

 

Otro ejemplo del arraigo que tuvo el León del Malecón en el imaginario colectivo de la ciudad de Murcia, es la breve nota que publicó en su primera página el Diario de Levante un 29 de julio de 1895, y que decía así:

 

"CALOR. Sepan los murcianos ausentes de Murcia, que aquí hace mucho calor. El agua de Santa Catalina está hecha caldo y no se puede beber. Dicen que se está fundiendo el León del Malecón, y hay muchos higos chumbos". 

 

En un caluroso verano más reciente, en 2022, recibimos una llamada del departamento de comunicación del Congreso de los Diputados preguntándonos por el León del Malecón: andaban buscando y difundiendo la historia de otros leones ilustres a lo largo y ancho de España; de los "primos" de los leones que custodian el Congreso.

 

Podéis saber más sobre esta curiosa historia pinchando en este enlace.

 

Una última curiosidad, de las muchas que se vinculan a esta pieza singular: como para gustos se hicieron los colores, no siempre hubo unanimidad en torno al León del Malecón; al menos, no en el sentido estético. Así, en el periódico 'Juventud Literaria' del 26 de junio de 1892, en su página 3, bajo el título de 'Semblanza' se incluyeron los siguientes versos:

 

"Llamar la atención desea,

y llama bien la atención,

porque la pobre es más fea

que el león del Malecón". 

 

Fuentes:

 

-'Donde empieza la ciudad: El león del Malecón. Un espacio de conexión entre la huerta y la ciudad de Murcia', ponencia de Clara Alarcón Ruiz recogida en la publicación de las actas del 12º Seminario sobre folklore y etnografía. Página 18. Ayuntamiento de Murcia, 2012. Pincha en este enlace para consultar la publicación.

 

-Ficha de la restauración del León del Malecón. Web del Centro de Restauración de la Región de Murcia. Pincha en este enlace para consultarla.

 

-'Guía secreta de Murcia', Cartagena y Mar Menor. Ismael Galiana y Adolfo Fernández. Página 79. Al-Borak Ediciones, Madrid, 1977.

 

-'Las Provincias de Levante'. 29 de julio de 1895. Página 1. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'Flores y Naranjos'. 18 de marzo de 1928. Páginas 3-4. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'El Segura. Diario de intereses materiales, científico, literario, artístico y de noticias'. 5 de marzo de 1863Página 2. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'El Semanario Murciano'. 2 de febrero de 1879. Página 2. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'El Liberal'. 9 de marzo de 1908. Artículo de José Frutos Baeza con el título de 'El Malecón'. Página 1. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'Diario de Murcia'. 1 de octubre de 1892. Página 1. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'Juventud Literaria'. 26 de junio de 1892. Página 3. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.

 

-'Diario de Levante'. 29 de julio de 1895. Página 1. Fondos digitalizados del Archivo Municipal de Murcia.


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