Pieza destacada
Gollete del baño de San Antonio. Periodo nazarí, siglo XIV. Cerámica dorada de reflejo metálico.

Se trata del cuello de un jarrón tipo Alhambra y fue encontrado en las excavaciones arqueológicas realizadas en un solar de la calle de San Antonio de Murcia.

 

Esta pieza está datada en el periodo nazarí, en el siglo XIV, es de cerámica dorada con reflejo metálico y tiene una altura de 40,3 centímetros y una anchura boca de 37,5.

 

La palabra 'gollete' con la que también se le denomina es de origen francés: hace referencia a la parte alta de la garganta, y en cerámica se aplica a la parte superior y estrecha de una vasija, jarra o jarrón, como es el caso. 

 

Los llamados “jarrones de la Alhambra” constituyen la más bella e importante producción salida de los hornos nazaríes. Tal y como explican desde el Patronato de la Alhambra y Generalife, se trata de un tipo de pieza de lujo. Son "unos jarrones monumentales pensados para decorar ambientes áulicos".

 

Su altura oscila entre 1,20 y 1,70 metros y van decorados exclusivamente en dorado, excepto unos pocos que lo combinan con el azul cobalto, siempre sobre vidriado estañífero blanco.

 

La pieza murciana está vidriada con cubierta estañífera de color blanco, y sobre ella se aplicó un dorado oscuro verdoso. Cuenta con una decoración organizada en ocho registros verticales que ocupan la mayor parte del cuello, así como con cinco registros horizontales situados en su base.

 

En la web del Patronato de la Alhambra y Generalife se explica que para la fabricación de este tipo de jarrones, hacían falta tres cocciones o cochuras: "la del jarrón bizcochado, la del vidriado y la del dorado", y que ello "implicaba una gran dificultad técnica y maestría de los alfareros que lo llevaron a cabo, sobre todo teniendo en cuenta el gran tamaño que debía tener el jarrón y la complejidad de tornear y vidriar una pieza de semejantes características".

 

Resulta difícil precisar con exactitud su fecha de fabricación; no obstante, se consideran más antiguos los decorados solamente en dorado, como es el caso de la pieza conservada en el Museo de la Ciudad de Murcia, cuya cronología viene siendo fijada en el siglo XIV. Los que llevan ornamentación azul cobalto se suelen fechar en torno al siglo XV.

 

La decoración está basada en motivos vegetales y geométricos, incluyendo algún registro con epigrafía.

 

Los jarrones de este tipo que sobrevivieron hasta el siglo XVIII, se convirtieron en preciados objetos del coleccionismo del XIX por su carácter oriental y romántico.

 

A pesar de que en el caso murciano sólo conservamos el cuello o gollete, su forma completa es fácil de conocer, pues todos los jarrones tipo Alhambra tienen un formato similar.

 

Consisten en una panza ovoide y en un cuello de sección octogonal, reforzado con molduras verticales. También tenía dos asas planas de gran tamaño rematadas en dos pequeñas figuras de animales.

 

Entre las imágenes de la derecha, incluimos la de un jarrón de este tipo conservado en el Museo Arqueológico Nacional. Se trata del Jarrón de la Cartuja de Jerez, encontrado en 1927 en el relleno de las bóvedas de dicho espacio y trasladado al Museo Arqueológico Nacional en 1930.

 

Para saber un poco más sobre estos espectaculares jarrones tipo Alhambra fabricados en los siglos XIV y XV, de los cuales se conservan muy pocos ejemplos en todo el mundo, pincha en este enlace a un artículo de la web del Patronato de La Alhambra y Generalife.


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